Todos nos preguntamos por qué envejecemos. El envejecimiento es un proceso fisiológico inevitable. Te contamos lo que debes saber acerca de él.
Si bien es cierto que no todos envejecemos a la misma velocidad ni de la misma forma, es evidente que el envejecimiento es un proceso fisiológico inevitable que lleva asociados muchos cambios en nuestro cuerpo.
Pero ¿por qué envejecemos? ¿Qué es lo que realmente ocurre en nuestro organismo para que esto ocurra? Te contamos todo lo que debes saber sobre este proceso.
¿Qué es el envejecimiento?
El envejecimiento se define como un conjunto de cambios que ocurren en el organismo, tanto morfológicos como funcionales, como consecuencia del paso del tiempo. Este proceso conlleva que el cuerpo, en general, vaya perdiendo sus capacidades poco a poco. Al final, un fallo en la función de uno o varios órganos lleva a la muerte de la persona.
Gracias a los avances científicos, la esperanza de vida de las personas ha aumentado de forma considerable, sobre todo en el primer mundo. Sin embargo, el envejecimiento, además de inevitable, sigue siendo un proceso que asusta a muchos.
Todos queremos vivir más y con una buena calidad de vida. Por eso, muchas veces nos preguntamos por qué envejecemos. Hablaremos a continuación de lo que ocurre realmente.
¿Por qué envejecemos?
La ciencia ha permitido avanzar cada vez más en descifrar lo que ocurre en realidad en el proceso de envejecimiento. Se han descubierto diferentes modificaciones que tienen lugar a nivel molecular y que explicarían los cambios que observamos a gran escala en las personas. Algunos de esos cambios son los siguientes.
Daños en el genoma
El genoma es el conjunto de material genético, compuesto por el ADN, presente en cada célula de nuestro organismo. Contiene la información para la formación y función de cada parte del cuerpo humano. A lo largo del tiempo, sufre constantes daños por agentes físicos, químicos e, incluso, por sustancias propias del individuo.
El propio ADN tiene una maquinaria para la detección y reparación de daños. Sin embargo, con los años, las alteraciones son cada vez mayores y la maquinaria comienza a fallar, de manera que estas se acumulan. Las células y los órganos pueden dejar de funcionar como deberían y es posible la aparición de cáncer, por ejemplo.
¿Por qué envejecemos? Inestabilidad de los telómeros
Nuestro ADN se organiza en cromosomas, que son una forma condensada de material genético. Son importantes sobre todo en la división celular. Los telómeros son los extremos de los mismos. Se encargan de dar estabilidad a la estructura y ayudar a que la división celular ocurra de forma correcta.
Lo que sucede es que, con las sucesivas divisiones que la célula lleva a cabo, estos telómeros se van acortando. Como resultado, se produce una pérdida de estabilidad en el genoma que, al final, se traducirá en más daños y mutaciones celulares.
Pérdida de equilibrio de las proteínas
Nuestro material genético contiene la información necesaria para la formación y conformación estructural de las proteínas. Las proteínas son unas moléculas muy importantes en nuestro organismo. Llevan a cabo diversas funciones, como por ejemplo el transporte de otras sustancias, el soporte de algunas estructuras o la transmisión de mensajes.
Cuando el ADN sufre daños, las instrucciones para que estas moléculas se formen y se plieguen de forma correcta fallan. Esto hace que se formen unas proteínas que no pueden llevar a cabo su función.
Si esto ocurre a gran escala y se acumulan muchas patológicas, los procesos del cuerpo humano se ven afectadas. Cuanto más daño genético haya, más proteínas en mal estado y más fallo de funciones. Así, todo va ligado al envejecimiento.
¿Por qué envejecemos? Otros cambios
Además de los que hemos nombrado, en las células ocurren también otra serie de cambios. Algunos de ellos son los siguientes:
Agotamiento de las células madre: pierden su capacidad para dividirse y generar células jóvenes.
Problemas de comunicación celular que pueden deberse, por ejemplo, a las proteínas disfuncionales de las que hemos hablado.
Acumulación de sustancias tóxicas en las mitocondrias por los procesos respiratorios.
Envejecimiento saludable
El conjunto de todos estos cambios y procesos que tienen lugar a nivel molecular se traducen en un deterioro de las funciones de los órganos y sistemas del cuerpo. Esta pérdida de función es la que observamos como envejecimiento.
Además de esto, debemos tener en cuenta que el envejecimiento no depende solo de nuestro material genético. El estilo de vida que llevamos y las sustancias y condiciones a las que nos exponemos, también influyen de forma considerable.
Por esto, es importante llevar un estilo de vida saludable, que incluye dieta sana, ejercicio y evitar sustancias que pueden ser dañinas, como el tabaco o el alcohol. Envejecer es inevitable, pero cada uno puede intentar hacerlo en las mejores condiciones posibles.
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